Este domingo 27 de noviembre se presentó Harry Styles en el Coliseo Live. Tras unos meses de estresantes negociaciones por parte de los organizadores del evento, este fue trasladado del Salitre Mágico a la locación final en el centro de eventos ubicado en la 80 en la capital.

Además de haber generado expectativa en los aficionados que añoraban ver al antiguo integrante de One Direction, en redes sociales denunciaron “situaciones de riesgo” y desorganización en el concierto.

Por un lado, no había claridad de cómo llegar a los asientos correctos, por lo que algunos asistentes del evento decidieron organizarse de manera espontánea para poder gozar del concierto sin perder los espacios por los que habían pagado.

Esto no fue lo único que sucedió, pues el cantante y actor inglés tuvo que suspender el concierto momentáneamente. Primero porque había fallas técnicas en el escenario, pero también porque había personas en la zona de Platino del concierto que no tenían adecuado acceso a aire.

Después de pedirle a todos en el recinto que dieran unos pasos hacia atrás y les dieran espacio a quienes estaban más adelante y en medio de la montonera, Styles decidió continuar con su concierto en Bogotá.

Mientras algunos acusan que había demasiadas personas en la zona Platino, otros señalan que los incidentes y desmayos se dieron porque la mayoría de los asistentes se agolparon contra el escenario. 

En redes sociales, personas que estaban desde las graderías compartieron imágenes que demostraban los asientos y espacios disponibles.

A través de un comunicado de Multiple Service & Supplies, Multiple S.A.S. y Medikplus IPS, entidades encargadas en la prestación de servicio de salud en el concierto, se atendieron 279 pacientes “principalmente por ataques de ansiedad hiperventilación y/o cefalea (…). Solo se debió realizar un traslado por taquicardia”.

El evento contó con 48 brigadistas, seis jefes de enfermería, tres médicos, incluido pediatra, y tres ambulancias.