Jue. Nov 21st, 2024

Bogotá se acerca a la peligrosa tasa de 50 % de ocupación de las unidades de cuidados intensivos (UCI). Según cuentas de la Secretaría de Salud, solo faltarían 23 pacientes más en UCI para llegar al límite que significaría la declaratoria de alerta naranja para toda Bogotá.

Con corte de este miércoles al mediodía, la capital registraba un 46,6 % de ocupación de UCI: de las 670 camas disponibles exclusivamente para covid-19 (tienen ventilador mecánico), ya hay 312 ocupadas: 109 por pacientes confirmados y otros 203 por casos sospechosos.

Aunque el Distrito sí aumentó la cantidad de camas disponibles, no lo hizo al ritmo prometido. En los últimos meses, se pasó de tener 935 camas UCI a 1.162 de las cuales, específicamente para el virus, el aumento fue de 451 camas a 670. Sin embargo, la promesa fue de 2.000 e, incluso, de 4.000 a más largo plazo.

Una de las razones que ha dado la Alcaldía de este retraso es que no se ha contado con los respiradores que ofreció el Gobierno Nacional. El Ministerio de Salud recordó este fin de semana que se compraron 2.767 que estarían llegando de manera escalonada entre mayo y septiembre y aseguró que se priorizará la entrega a Bogotá de 425 entre junio y julio.

“A veces la gente cree que tener una UCI es fácil, pero es costoso, es difícil, requiere de los equipos, el monitor, el respirador, que no se produce en Colombia. Se está haciendo un esfuerzo por producirlos en la Universidad de La Sabana y la Universidad de Antioquia, pero eso va a tomar un tiempo. Si faltan no es por falta de gestión, hemos hecho todo. Pero desafortunadamente con la pandemia, Estados Unidos y Europa cerraron su exportación y entramos en un mercado internacional muy competido”, aseguró la alcaldesa Claudia López.

A veces la gente cree que tener una UCI es fácil, pero es costoso, es difícil, requiere de los equipos, el monitor, el respirador, que no se produce en Colombia