Selección Colombia mira el tablero: posibles cambios para vencer a Marruecos
“No vinimos a ganarle a Alemania, vinimos a ganar el Mundial”, decía Catalina Usme minutos después del 2-1 contra Alemania que hizo vibrar al país. Ella y sus compañeras saben que falta un peldaño más y que, a pesar de l dulce noche que vivieron el domingo en Sidney, nada está hecho.
La situación, de cara al duelo de este jueves contra Marruecos, es clara: una victoria asegura el primer lugar del grupo H con pleno de 9 puntos; un empate haría que Alemania, derrotando a Corea, se trepe a la punta con 6 unidades y una generosa diferencia de gol (debutó con 6 goles) y una derrota inclusive alcanzaría aunque con mucho dramatismo, pues se definiría el segundo lugar con las marroquíes por diferencia de gol, esa que hoy tienen ellas en -5 y nosotras en +3.
Posibles variantes
El instinto dice que, antes que depender de otros resultados, la apuesta segura es ganar para no estar mirando ningún espejo retrovisor. Y se puede, no solo por la evidencia de los 6 que ya le hizo Alemania a Marruecos o porque Colombia le ganó a Alemania sino porque el equipo tiene tan aprendido el discurso de los siete partidos en esta Copa Mundo que no se siente, a pesar de la euforia por sus resultados, ni cerca de su auténtico objetivo.
Hay que ir entonces Marruecos a ganarle y no a tentar la suerte. Y en esa planeación se pueden mover algunas fichas que darían la cuota de riesgo para salir no a sumar sino a ganar. El punto principal son las jugadoras que están en recuperación tras la batalla que fue el duelo contra las alemanas, que pegaron también, no como dice el diario Bild que las colombianas fueron las única. Eso abre interesantes opciones.
En la defensa, por ejemplo, podría hacerse un ajuste: si Jorelyn Carabalí se recupera -como se espera- podría mantenerse el cuarteto posterior que ha garantizado seguridad hasta ahora o podría correrse un riesgo en el lateral derecho. Carolina Arias ha jugado los dos partidos y podría necesitar un respiro pensando en unos octavos de final que pueden deparar a Francia o Brasil y eso le daría una opción a Ana María Guzmán.
Muchos creen que está joven, y sí, pero fue compañera de Linda Caicedo hasta la final del Mundial Sub-17 y está en la nómina como parte de su proceso. Con Arias hay más fortaleza defensiva pero con los centros espectaculares de Guzmán y su propio buen remate se podría ganar una ficha más a la ofensiva. Es un riesgo, pero el que no los corre no llega al séptimo partido.
En el medio campo hay varias situaciones: Daniela Montoya tiene un corazón que no le cabe en el cuerpo y se mantiene como titular por valor y experiencia, pero si tuviera que descansar para este partido en Perth podría apoyarse en el gran Mundial que juega Lorena Bedoya Durango y abrir una puerta para una mediocampista con buena salida como Mónica Ramos, aunque vale decir que ella ha estado entrenando diferenciado por un problema de rodilla que trajo desde Gremio de Brasil. Lo bueno es que tuvo tiempo de recuperación y podría ser opción como titular o como emergente.
Y para el ataque, un asunto puntual. Es caro que para que Mayra Ramírez no salga a la cancha tiene que caer un meteorito: se está jugando un torneo excepcional que le está debiendo un gol porque lo ha hecho todo para celebrarlo y en dos partidos se le ha resistido. Pero si el cuerpo médico recomendara reposo, hay opciones: Lady Andrade también ofrece potencia en el duelo directo pero suma juego aéreo y remate, con lo cual sería un cambio muy natural.
Como alternativa, Elexa Bahr es otra carta muy factible, que puede dar una mano en una tarea de creación alimentada por Linda Caicedo, Catalina Usme y Leicy Santos, esta última sacrificada en la titular contra Alemania por una situación de necesidad de fortalecer la marca, pero ahora absolutamente necesaria por su pase y su pegada para resolver lo que se presente en Perth.