Japón: las imágenes que dejó el terremoto de magnitud 7,6; hay daños en vías y casas
Un terremoto de 7,6 grados Richter golpeó este lunes la prefectura de Ishikawa, en el litoral occidental del centro de Japón, y obligó a activar una alerta por tsunami en buena parte del archipiélago. El terremoto causó importantes daños y dejó un saldo de al menos cuatro muertos y 97.000 evacuados de las zonas costeras, a quienes se les ordenó dirigirse a terrenos más elevados.
El terremoto, que se sintió incluso en Tokio, se produjo en la península de Noto a las 16:10, hora local, e inicialmente la Agencia Meteorológica de Japón (JMA) estimó que el temblor había sido de 7,4 grados en la escala de Richter, aunque después revisó al alza la magnitud en dos décimas.
Del mismo modo, la agencia dijo inicialmente que el temblor se produjo cerca del suelo y más tarde situó el hipocentro del mismo a 16 kilómetros de profundidad. El seísmo alcanzó una magnitud de 7 en la escala japonesa cerrada de 7, que se centra en la capacidad destructiva de los temblores más que en la intensidad.
Imágenes difundidas por la televisión nipona o en redes sociales mostraron la gran fuerza del temblor y el poder destructivo del mismo, especialmente en la localidad de Wajima (unos 500 kilómetros al oeste de Tokio), donde se han registrado al parecer los daños más graves.
En esta urbe de unos 27.000 habitantes al menos unas 30 viviendas sufrieron graves daños, dejando al menos a seis personas sepultadas bajo los escombros, y un edificio se derrumbó. El temblor provocó además un gran incendio en esta localidad.
En un video en la red social X se pudo ver a casas antiguas destruidas. “Es el distrito Matsunami de Noto. Estamos en una situación horrible. Por favor, ayúdenos. Mi ciudad está en una situación horrible”, lamentó una persona en la grabación.
Hasta las 21:00 hora local se habían registrado 60 réplicas del terremoto y la JMA advirtió que durante la próxima semana es muy probable que se produzcan más temblores que alcancen el nivel 7 japonés.
En la península de Noto los más de 50 sismos tuvieron una magnitud 3,2 o superior en un lapso de cuatro horas.
El terremoto también dañó carreteras y autopistas de la región y obligó a detener momentáneamente la circulación de varias líneas de tren de alta velocidad.
Se reportaron más de 30.000 viviendas sin luz en Ishikawa y otras 3.600 en la vecina Niigata en la misma situación, aunque las autoridades niponas dijeron que no se ha detectado ningún daño en ninguna de las centrales nucleares del país.
“Se ha confirmado que no hay anomalías en la central nuclear de Shika (situada en la prefectura de Ishikawa, ndlr) ni en otros emplazamientos por el momento”, declaró el portavoz gubernamental Yoshimasa Hayashi.
El terremoto obligó a su vez a activar la alerta de tsunami por la posible llegada de olas de hasta cinco metros de altura en la prefectura de Ishikawa y para olas de hasta tres metros para las prefecturas de Fukui, Toyama, Hyogo, Niigata y Yamagata.
También se implementó una alerta por tsunamis para toda la costa occidental de la islas de Honshu y Hokkaido y el norte de la isla de Kyushu.
La intensidad del terremoto y la gravedad de la alerta obligaron a los presentadores de la radiotelevisión pública japonesa NHK a instar casi a gritos a la gente que se encontraba en la zona a desplazarse a lugares en altura.
“Todos los residentes deben ir inmediatamente a terrenos más elevados”, instó el canal de televisión NHK. “Somos conscientes de que sus casas y pertenencias son muy queridas para ustedes, pero sus vidas son más importantes que cualquier otra cosa. Corran a las zonas más altas posibles”, urgió el presentador.
En Wajima, las olas llegaron a alcanzar los 1,2 metros de altura, y otras localidades a lo largo del litoral occidental nipón reportaron subidas del nivel del mar por debajo de un metro.
Incluso las autoridades de la vecina Corea del Sur informaron que la costa de la provincia de Gangwon, que mira al mar de Japón (llamado mar del Este en las dos Coreas), recibió olas de entre 20 y 45 centímetros.
Por fortuna, el agua no generó daños ni en Japón ni en Corea del Sur, aunque se espera que la alerta de la JMA permanezca activada varias horas más. Por el momento el organismo decidió rebajar solo la alerta que afectaba a Ishikawa, donde ahora se esperan posibles olas de hasta tres metros en vez de cinco.
El Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico, con sede en Hawái, informó además que el riesgo de tsunami había quedado atrás. “La amenaza de tsunami ha pasado en gran medida”, declaró la agencia estadounidense.
El ministro de Defensa, Minoru Kihara, informó que 8.500 militares fueron movilizados para atender la emergencia y que otros 1.000 militares están preparados para dirigirse a la región. Mientras el presidente de EE. UU., Joe Biden, ofreció “la asistencia que sea necesaria al pueblo japonés”.
Situado en el denominado “cinturón de fuego” del Pacífico, Japón es uno de los países del mundo donde los sismos son más frecuentes.
El archipiélago aplica normas de construcción extremadamente estrictas, de modo que los edificios suelen ser capaces de resistir fuertes sismos, y los residentes están acostumbrados a este tipo de situaciones.
Pero persiste en el país el traumático recuerdo del terrible terremoto de magnitud 9,0 seguido de un gigantesco tsunami que en marzo de 2011 provocó una catástrofe que dejó unos 20.000 muertos o desaparecidos.
Esa catástrofe incluyó el accidente nuclear de Fukushima, el peor registrado en el mundo desde el de Chernóbil en 1986. El tsunami causó que se fundieran tres reactores de la central nuclear japonesa.
Después, en marzo de 2022, un terremoto de magnitud 7,4 frente a las costas de Fukushima sacudió amplias zonas del este de Japón y causó tres muertos. La capital, Tokio, fue devastada por un gran terremoto hace un siglo, en 1923.