Fernando Gaviria: la mala racha que busca romper en el Giro de Italia
Es claro que Fernando Gaviria (Movistar) no es el mismo embalador que volvía añicos a sus rivales por allá en el Giro de Italia del 2017, pero en la presente edición de la carrera tiene serias opciones de ganar una etapa.
A Gaviria lo llevaron al Giro a eso, a ganar. No es común que el Movistar se entregue del todo a un embalador, pues siempre ha sido un grupo que planifica las carreras en torno a los escaladores, pero las cosas en la vida, y en el ciclismo, cambian.
No es un grupo experto en trenes para preparar un embalaje, pero teniendo a Gaviria lo intentan y lo tienen que hacer, esa es su primera apuesta en esta competencia.
Ayer, el colombiano terminó de séptimo, se vio sorprendido por sus rivales y no tuvo un buen golpe de pedal para el remate.
La idea de ganar en una grande lo carcome, pues no lo hace desde el 13 de mayo del 2019, cuando se impuso en la fracción entre Vinci y Orbetello. Ese día fue segundo y después de la descalificaron de Elia Viviani y subió al podio con ‘cara de tote’ a recibir el premio.
El próximo sábado cumplirá cuatro años sin celebrar una victoria en una de las pruebas de tres semanas y en este Giro tiene una buena oportunidad.
En el papel, Gaviria no tiene rivales fuertes, pues no están los mejores embaladores del mundo y en ese grupo de especialistas de los últimos 200 m sobresale su nombre.
Pascal Ackermann, que no está en su mejor momento, Michael Matthews, que sería su conticante más serio, Mads Pedersen, que no es más rápido que el colombiano, y Mark Cavendish, que no es el de otra épocas, conforman el lote de velocistas del Giro.
Este lunes, tiene otra opción, en la etapa entre Vasto y Melfi, de 216 km, pero deberá de pasar dos subidas consecutivas de Monticchio (6,3 km a 6,4 por ciento de media) y de Valico La Croce (2,6 km a 7,6 por ciento), lejos de la meta.