Así serán las etiquetas que medirán la contaminación de vehículos en Bogotá
Luego de casi un año desde que se expidió la resolución de etiquetado ambiental para los carros en Bogotá, se dejó en firme la norma que busca clasificar a los vehículos que transitan por la capital del país de acuerdo al nivel de contaminación que provocan.
La Secretaría de Ambiente explicó que el etiquetado vehicular ambiental (EVA) es una herramienta que, junto con otras estrategias del Distrito, busca mejorar la calidad del aire y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero en Bogotá.
La idea es que, en adelante, la restricción a los vehículos en Bogotá se haga con base en cuánto contaminan
Por esta razón la entidad dejó en firme la Resolución 1545 de 2023 para la implementación de esta iniciativa que clasificará a los vehículos de acuerdo con la cantidad de contaminantes que emiten. Se espera que esta nueva normativa pueda empezar a aplicar desde diciembre de 2023 y que su plan piloto dure aproximadamente dos años con los transportadores de carga.
“La idea es que, en adelante, la restricción a los vehículos en Bogotá se haga con base en cuánto contaminan. A partir de la firma de la resolución, empezamos en un piloto de dos años con los transportadores de carga”, indicó la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.
La implementación de este programa se realizará con los transportadores de carga, será voluntaria, es de carácter ambiental, no modificará el pico y placa y no tendrá sanciones. La instalación de las etiquetas las hará la Secretaría de Ambiente y el objetivo es llegar a 65.000 camiones que transitan en Bogotá.
El etiquetado vehicular ambiental establece que habrá cinco etiquetas: azul (cero emisiones), verde, amarillo, naranja y gris, las cuales serán instaladas en los vehículos de acuerdo con el factor o valor indicativo que establece el impacto de las emisiones contaminantes. El rango será entre 0 y 100.
El etiquetado tendrá una vigencia que dependerá de la categorización de cada vehículo, por ejemplo, para las etiquetas azules, será permanente; para el verde, de 36 meses; amarilla y naranja, de 24 meses, y para el gris, de 18 meses. La solicitud de renovación se deberá realizar un mes antes del vencimiento de dichos periodos.
Por ahora no se tienen contempladas restricciones a los vehículos particulares o a otra forma de movilidad con base en el etiquetado. “El piloto nos va a ayudar a entender cómo puede funcionar, aprender también de lo que han hecho otros países para utilizar esta herramienta y que en el futuro podamos aplicarla en restricciones al pico y placa”, explicó Urrutia.